Una economía de cinco billones: Dónde crece hoy el negocio verde

Alberto Noriega     12 diciembre 2025     4 min.
Una economía de cinco billones: Dónde crece hoy el negocio verde

La economía verde superó los 5 billones de dólares en 2024. Energías limpias, movilidad eléctrica y resiliencia lideran el crecimiento.

La economía verde superó los cinco billones de dólares en 2024 y se perfila como uno de los principales motores de crecimiento global, solo por detrás del sector tecnológico. Así lo señala el informe Already a Multi-Trillion-Dollar Market, elaborado por la Alliance of CEO Climate Leaders, que identifica los mercados, tecnologías y regiones que están liderando esta transformación económica en un contexto geopolítico marcado por la incertidumbre.

La economía verde como oportunidad global

La economía verde engloba las actividades económicas que reducen el impacto ambiental, protegen el capital natural y generan bienestar social. Según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, este modelo no solo mitiga los riesgos climáticos, sino que crea nuevas oportunidades de crecimiento, empleo e innovación.

El informe de la Alliance of CEO Climate Leaders —coalición impulsada por el Foro Económico Mundial y de la que forma parte BBVA— estima que este ecosistema económico podría superar los siete billones de dólares en 2030. Un dato clave para entender su atractivo es que los ingresos verdes crecen, de media, el doble de rápido que los convencionales, además de facilitar el acceso a capital más barato y a valoraciones más elevadas.

Este crecimiento se produce pese a un entorno geopolítico complejo. La reciente COP30 cerró con compromisos limitados en materia de abandono de los combustibles fósiles, pero mantuvo objetivos financieros relevantes: movilizar 1,3 billones de dólares anuales para acción climática y 300.000 millones para adaptación en países en desarrollo. Desde una perspectiva económica, el informe subraya que más del 50% de las emisiones globales ya podrían reducirse con soluciones competitivas en costes.

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Mercados maduros: la base del crecimiento

El grueso de la economía verde actual se apoya en tecnologías consolidadas, donde los costes han caído de forma drástica y la adopción se ha acelerado. Destacan especialmente:

  • Energía solar fotovoltaica y eólica, que han superado las previsiones de crecimiento. Según la Agencia Internacional de la Energía, en 2024 se instalaron 600 gigavatios de nueva capacidad solar, un récord histórico.

  • Vehículos eléctricos, que se han convertido en uno de los pilares del mercado verde gracias a la mejora de baterías, la ampliación de infraestructuras de recarga y el apoyo regulatorio.

Estas soluciones de mitigación climática, orientadas a reducir emisiones de gases de efecto invernadero, representan cerca del 80% de la demanda actual, de acuerdo con datos del World Economic Forum.

Adaptación y resiliencia: el mercado que gana peso

Más allá de la mitigación, el informe identifica un segundo gran bloque en expansión: el de la adaptación y la resiliencia climática. Este mercado —que ya alcanza los 1,1 billones de dólares— incluye desde materiales de construcción resistentes a fenómenos extremos hasta infraestructuras contra inundaciones, gestión de residuos, sistemas de predicción climática y evaluación de riesgos.

A medida que los impactos del cambio climático se intensifican, estas soluciones dejan de ser exclusivas del Sur Global y ganan protagonismo en el Norte Global, donde los riesgos físicos y económicos crecen con rapidez. Actualmente, más de una quinta parte de las inversiones climáticas ya se dirigen a este tipo de soluciones.

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Tecnologías emergentes y dependencia regulatoria

Otras áreas clave de la economía verde —como el hidrógeno bajo en carbono, la captura, uso y almacenamiento de carbono (CCUS) o los biocombustibles avanzados— presentan un gran potencial, pero siguen siendo más costosas y menos maduras. Su despliegue depende en gran medida de políticas públicas, incentivos y marcos regulatorios estables que reduzcan el riesgo para los inversores.

China, líder indiscutible del mercado verde

En términos geográficos, China se consolida como el principal actor de la economía verde. En 2024, su inversión en energía limpia alcanzó los 659.000 millones de dólares, muy por encima de Europa y Estados Unidos, tanto en gasto como en despliegue industrial e innovación tecnológica. Este liderazgo refuerza su posición estratégica en cadenas de valor clave, desde las renovables hasta las baterías y los vehículos eléctricos.

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Competir en la economía verde

El informe concluye que triunfar en la economía verde requiere algo más que buenas intenciones. Las empresas que logran escalar combinan fundamentos empresariales clásicos —estrategia clara, propuesta de valor sólida y capacidad de ejecución— con elementos específicos del sector verde: madurez tecnológica, reducción de costes, alianzas estratégicas y acceso a “capital inteligente”.

La economía verde ya no es un nicho ni una apuesta a largo plazo: es un mercado multimillonario en plena expansión, impulsado por la urgencia climática, la competitividad económica y la transformación de la demanda. En un mundo cada vez más expuesto a riesgos ambientales y geopolíticos, estos mercados no solo ofrecen crecimiento, sino también resiliencia económica.

El mensaje es claro: quienes entiendan dónde están las oportunidades —y cómo escalar en ellas— no solo contribuirán a la transición ecológica, sino que definirán los ganadores de la próxima década económica.

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