El Reino Unido se prepara para los 45 °C

Alberto Noriega     1 julio 2025     5 min.
El Reino Unido se prepara para los 45 °C

El Reino Unido podría alcanzar 45 °C en los próximos años, según el Met Office. El riesgo de 40 °C se ha triplicado desde 2000.

En el Reino Unido, los científicos del Met Office advierten que el país podría volver a alcanzar los 40 °C en los próximos 12 años, e incluso superar los 45 °C bajo las condiciones climáticas actuales. El informe fue publicado en junio de 2025 y se basa en modelos climáticos globales actualizados. Las temperaturas extremas ya marcaron un precedente en julio de 2022, con incendios, muertes y colapsos en la infraestructura. La tendencia es clara: el riesgo climático se acelera, y urge una planificación seria frente al calor extremo.

El calor récord ya no es excepción

El verano de 2022 marcó un antes y un después: por primera vez en la historia, el Reino Unido alcanzó los 40,3 °C en Coningsby, superando por mucho el récord anterior de 38,7 °C en Cambridge. Más de 1.000 muertes en personas mayores se registraron solo durante los cuatro días de pico de calor, y el verano cerró con más de 3.000 fallecimientos atribuibles al calor. La emergencia climática se manifestó no solo en cifras, sino en infraestructuras colapsadas, incendios en viviendas, iglesias y tierras agrícolas, y múltiples “incidentes graves” declarados por bomberos en Londres, Leicestershire y South Yorkshire.

Según el Met Office, el riesgo de alcanzar 40 °C ha aumentado más de 20 veces desde los años 60 y se ha casi triplicado desde el año 2000. Usando modelos climáticos globales, los científicos estiman que hay una probabilidad del 50 % de que este umbral vuelva a superarse antes de 2037. Incluso escenarios de 46,6 °C son considerados plausibles si el calentamiento continúa su curso actual.

Un futuro de olas de calor permanentes

Más allá de picos aislados, el informe advierte que las olas de calor serán más largas, más severas y más frecuentes. En el sureste de Inglaterra, hasta dos tercios de los días de verano podrían superar los 28 °C, el umbral oficial para declarar una ola de calor. En ese escenario, regiones enteras del país podrían sufrir más de un mes consecutivo con temperaturas extremas, un fenómeno sin precedentes en el clima británico moderno.

Pexels Pixabay 220769

El informe también anticipa hasta 12 días consecutivos por encima de los 35 °C, condiciones que hace unas décadas se habrían considerado imposibles. Dr. Nick Dunstone, coautor del estudio, comparó estas proyecciones con el icónico verano de 1976: “Aquel verano tuvo más de dos semanas con más de 28 °C. Ahora, eso podría durar más de un mes”. La necesidad de prepararse ya no es opcional: se trata de proteger la salud pública, la energía, el transporte y los ecosistemas.

No estamos listos para tanto calor

“El cambio climático ha convertido lo improbable en probable”, afirmó la doctora Gillian Kay, autora principal del estudio. Sus palabras no son una advertencia vaga: reflejan una realidad respaldada por datos, modelos y precedentes concretos. Si no se toman medidas preventivas, el calor extremo podría volverse una crisis sanitaria y logística recurrente en el Reino Unido.

Los expertos del Met Office subrayan la urgencia de adoptar planes adaptativos: aislamiento térmico en hogares, centros de emergencia climática, infraestructuras resistentes al calor y políticas urbanas resilientes. Este tipo de medidas, hoy aún escasas en Reino Unido, deben acelerarse si se pretende evitar los efectos más letales de un clima cada vez más hostil. Porque, como advierte el estudio, la amenaza ya está aquí, y crecerá.

Pexels Naveen Annam 734127 1578332

Los 40 °C son solo el principio

El Met Office ha confirmado que temperaturas aún más extremas, como los 45 °C, son posibles en el clima actual, sin necesidad de que aumenten las emisiones. Esa cifra ya no pertenece al terreno de la ciencia ficción, sino a la planificación estratégica: el informe indica que incluso los 46,6 °C podrían alcanzarse en las próximas décadas, dependiendo de las condiciones meteorológicas y la trayectoria de las emisiones. Esta proyección coloca al Reino Unido dentro del grupo de países europeos en riesgo extremo de olas de calor mortales.

Además del impacto humano, el estrés térmico amenaza directamente a sectores críticos como la agricultura, la red ferroviaria y el sistema eléctrico. Las vías férreas se deforman, los cultivos fallan, y la demanda de energía por refrigeración crece hasta colapsar las redes. Las olas de calor prolongadas elevan el riesgo de incendios forestales y la concentración de contaminantes en el aire, aumentando las hospitalizaciones por enfermedades respiratorias. Todo esto obliga a replantear la noción misma de «verano británico».

Prepararse para el Reino Unido de 2050

El calor ya no será una excepción, sino una constante. Las ciudades británicas —no diseñadas para estas temperaturas— requieren una transformación estructural urgente, desde más zonas verdes y tejados reflectantes, hasta redes de transporte refrigeradas. El Met Office insiste en la necesidad de planificar con décadas de anticipación. Hoy, la infraestructura del Reino Unido no está preparada para resistir un mes entero de calor extremo con temperaturas por encima de 35 °C.

Los expertos en salud pública advierten que, sin cambios drásticos, las muertes relacionadas con el calor podrían duplicarse o triplicarse para mediados de siglo. A diferencia de amenazas más visibles como las tormentas o las inundaciones, el calor mata en silencio, afectando especialmente a ancianos, niños y personas con enfermedades crónicas. La ventana de oportunidad para adaptarse se está cerrando rápidamente, y cada ola de calor debería ser vista no como un evento aislado, sino como una señal clara de lo que está por venir.

Comentarios cerrados