Pirelli lanza «Neumáticos Cibernéticos 5G» que detectan peligros en tiempo real

Pirelli y la región italiana de Apulia lanzarán en julio de 2025 el primer piloto mundial de “neumáticos cibernéticos” con sensores integrados. El sistema monitoriza en tiempo real el estado del asfalto mediante sensores en la banda de rodadura y cámaras montadas en los vehículos. La tecnología, considerada un activo estratégico nacional, será desplegada en flotas regionales conectadas por 5G. Italia busca así mejorar el mantenimiento vial y la seguridad mediante datos precisos recogidos desde el suelo.

Neumáticos que leen la carretera

Italia será el primer país del mundo en mapear el estado de sus carreteras a través de los propios neumáticos. La iniciativa, impulsada por la región de Apulia en colaboración con Pirelli, se pondrá en marcha en julio de 2025 utilizando su tecnología Cyber Tyre. Se trata de un sistema de sensores integrados directamente en la banda de rodadura del neumático, capaces de resistir fuerzas superiores a 3.500 G mientras capturan datos sobre rugosidad, irregularidades, temperatura y desgaste.

Los vehículos no serán particulares, sino parte de una flota dedicada gestionada por Ayvens, empresa europea de renting y gestión de flotas, lo que permitirá una recopilación sistemática de datos. Estos datos se transmitirán vía Bluetooth de baja energía a los sistemas del vehículo, y desde ahí se enviarán a la nube, donde serán accesibles por las autoridades mediante paneles digitales. En vez de esperar a que se denuncie un bache, el sistema permitirá monitorización preventiva, continua y basada en datos.

Este avance convierte al neumático en un nodo del Internet de las Cosas (IoT), en comunicación constante con su entorno. Las ruedas informarán en tiempo real sobre condiciones peligrosas, facilitando intervenciones rápidas y mejorando la eficiencia del mantenimiento vial. La precisión y actualización constante del sistema prometen reducir accidentes provocados por el mal estado del asfalto.

Un activo estratégico nacional

El gobierno italiano ha clasificado oficialmente esta tecnología como “activo estratégico nacional”. ¿Por qué? Porque lo que hasta ahora era una pieza pasiva del vehículo se ha transformado en una fuente sensible de datos sobre infraestructura, localización y seguridad. Controlar y proteger esta información se convierte así en un tema de soberanía tecnológica.

Desde 2022, Pirelli ha reforzado su presencia en Apulia con la creación de un Centro de Soluciones Digitales en Bari, en colaboración con la Universidad de Bari y el Politécnico. Desde este hub se han impulsado desarrollos en inteligencia artificial aplicada a neumáticos y software vehicular, así como alianzas clave como la mantenida con Bosch para ampliar la capacidad de los sensores.

Michele Emiliano, presidente regional de Apulia, lo resumió con claridad: “La tecnología puede salvar vidas. En este caso, servirá como termómetro del estado de salud de nuestras carreteras.” Un diagnóstico en tiempo real que transforma el mantenimiento vial de reactivo a predictivo.

Comunicación en tiempo real con 5G

La joya del sistema de Pirelli es su integración con redes 5G, que permite a los neumáticos no solo comunicarse con el coche, sino también con otros vehículos y con infraestructuras cercanas. Este ecosistema interconectado, probado por primera vez en Turín junto a Audi, TIM, Ericsson y KTH, abre la puerta a alertas instantáneas de peligros en la carretera.

Un ejemplo: si un coche equipado detecta aquaplaning o pérdida de adherencia, puede enviar esa alerta inmediatamente a los vehículos que le siguen, con una latencia mínima gracias al 5G. Esto crea una “inteligencia colectiva del tráfico”, en la que cada neumático aporta información a un sistema común de seguridad vial.

Más allá del estado de la calzada, los neumáticos recopilan datos sobre modelo, profundidad de la banda, kilometraje, carga dinámica, temperatura y aceleración. Esta información es clave para que el coche ajuste de forma automática sistemas de control de tracción, frenado de emergencia o suspensión activa.

Aplicaciones futuras en movilidad y conducción autónoma

El Cyber Tyre no solo mejora la seguridad inmediata, sino que prepara el camino hacia vehículos autónomos más inteligentes y conscientes de su entorno. Integrado en el sistema operativo del coche, puede alimentar algoritmos de conducción autónoma con datos del terreno en tiempo real, anticipando decisiones que hoy dependen exclusivamente de cámaras y radares.

También será clave en el desarrollo de infraestructuras urbanas inteligentes. A medida que los neumáticos recojan millones de datos al día, las ciudades podrán priorizar obras, detectar zonas de deterioro acelerado y hasta predecir fallos estructurales antes de que ocurran.

El modelo combina sostenibilidad, precisión y automatización. Al evitar inspecciones manuales o por helicóptero, se reducen costes y emisiones, mientras que la integración en flotas públicas permite escalar el sistema de forma rentable. Es un ejemplo claro de cómo la movilidad del futuro no será solo eléctrica, sino también profundamente conectada.

Donde antes hubo caucho, ahora hay datos

La rueda, símbolo milenario del progreso, vuelve a girar hacia el futuro. Esta vez no como un simple mecanismo de desplazamiento, sino como un instrumento de diagnóstico, comunicación y predicción. Pirelli no solo ha puesto sensores en sus neumáticos: ha creado una nueva interfaz entre la carretera y la inteligencia artificial.

En una época en la que cada capa de nuestras ciudades se vuelve inteligente, el asfalto no podía seguir siendo ciego. Convertir las ruedas en nodos de información transforma la lógica misma del transporte: la movilidad ya no se mide solo en kilómetros, sino en bits.

Lo que empezó como una prueba regional en Apulia podría extenderse rápidamente a otras ciudades del mundo. Porque si cada coche que circula puede ser también un inspector de carreteras, la infraestructura se vuelve viva, reactiva y segura. Es una promesa de movilidad más consciente, más precisa y más humana, impulsada, paradójicamente, desde lo que antes era solo goma y presión.