Tesla se prepara para lanzar sus robotaxis en Austin antes de lo previsto

Alberto Noriega     1 junio 2025     4 min.
Tesla se prepara para lanzar sus robotaxis en Austin antes de lo previsto

Tesla lanzará sus robotaxis autónomos en Austin el 12 de junio con una flota inicial de Model Y sin conductor, según informes.

Tesla se prepara para lanzar el próximo 12 de junio su primer servicio de robotaxi autónomo en Austin, Texas, utilizando una flota de Model Y sin conductor. La información ha sido confirmada por Elon Musk, quien asegura que ya se han realizado pruebas públicas exitosas sin incidentes. Aunque la fecha aún podría cambiar, se prevé que el servicio comience de forma limitada y solo para empleados de Tesla, antes de una eventual apertura al público. El movimiento supone un paso decisivo en la carrera por el coche autónomo, con la compañía adelantándose a su cronograma inicial.

Pruebas reales, coches sin piloto

Tesla ha estado operando en las calles de Austin una flota de vehículos Model Y sin ningún conductor al volante, durante varios días y sin registrar incidentes, según confirmó Elon Musk. Este despliegue representa la primera prueba pública completamente autónoma de la empresa, con un ingeniero ubicado únicamente en el asiento del pasajero, sin intervención remota directa.

A diferencia de competidores como Waymo, que llevaron a cabo más de un año de pruebas escalonadas con y sin conductor antes de su lanzamiento comercial en Austin, Tesla ha acelerado el proceso. Según Musk, la compañía está «un mes adelantada al cronograma» y espera realizar la primera entrega de vehículo totalmente autónoma de fábrica a cliente el mes próximo. Todo esto refuerza la estrategia de Tesla de apostar por una visión 100% basada en cámaras, sin LiDAR ni radar, a pesar de las dudas que este enfoque sigue generando en la industria.

Tesla Cybercab Enthullt Preis Fsd Hardware Release Date Und Mehr 384874

Lanzamiento limitado y enfoque interno

El servicio se lanzará con una flota inicial de apenas 10 a 20 vehículos, todos ellos Model Y modificados con el sistema de Conducción Autónoma Total (FSD, por sus siglas en inglés). Aunque aún no se usará el futurista “Cybercab” presentado por Musk, los vehículos están siendo adaptados para operar dentro de zonas geográficas específicas de Austin, optimizando rutas y eficiencia en base a datos de prueba.

En su fase inicial, el servicio estará restringido a empleados de Tesla, una estrategia diseñada para identificar y corregir posibles errores sin exposición pública directa. En estos test internos, la empresa ha completado más de 1.500 trayectos entre Austin y San Francisco, evaluando no solo la conducción autónoma, sino también la logística del servicio: recarga, limpieza, asistencia remota y gestión de flota. Todo este ecosistema técnico apunta a un objetivo claro: que Tesla pueda operar una red de transporte sin intervención humana directa, ni siquiera como soporte de emergencia.

Un robotaxi con más preguntas que respuestas

A medida que se acerca la fecha, surgen interrogantes regulatorios y éticos. La NHTSA ha solicitado información adicional sobre cómo Tesla evalúa y garantiza la seguridad de su sistema autónomo, en particular en cuanto al uso de la teleoperación. Algunos informes sugieren que Tesla podría requerir hasta un operador remoto por cada vehículo, lo que cuestiona la viabilidad a gran escala del modelo.

Tesla Cybertruck Line

Además, mientras Musk presume avances, los expertos señalan que la duración de las pruebas es notablemente menor que la de sus competidores. ¿Está Tesla priorizando la velocidad sobre la seguridad? La empresa, hasta ahora, ha evitado divulgar detalles sobre posibles accidentes, margen de error o protocolos ante fallos en la conducción autónoma. La transparencia —o la falta de ella— será clave en la evaluación del proyecto, especialmente si pretende convertirse en referencia mundial del robotaxi urbano.

Entre la revolución y la responsabilidad

Tesla está a punto de romper una barrera histórica: poner en circulación vehículos sin conductor humano, sin intervención remota, y sin sistemas redundantes como LiDAR. La apuesta es tan ambiciosa como arriesgada. Si logra consolidarse, podría redefinir el concepto de movilidad urbana, descentralizando el transporte y reduciendo costes a escala masiva.

Pero el margen de error en esta fase pionera es mínimo. El lanzamiento en Austin será observado con lupa, no solo por reguladores, sino por toda la industria. La diferencia entre un caso de éxito y un fallo mediático puede depender de un solo trayecto. Y mientras Musk promete eficiencia y vanguardia, lo que el público exigirá será confianza, fiabilidad y responsabilidad. Porque no se trata solo de llegar más rápido: se trata de llegar bien.

Comentarios cerrados