Polestar 1, sin miedo a nada, ni siquiera al Infierno Verde

Miguel Lorente     21 julio 2020     2 min.
Polestar 1, sin miedo a nada, ni siquiera al Infierno Verde

Misha Charoudin rueda en el Circuito de Nürburgring a bordo de un enemplar del Polestar 1 demotrando que este GT es todo un deportivo de altos vuelos

Polestar trata de brillar con luz propia ahora que es una marca independiente de Volvo. Así, la firma de la estrella polar busca lucirse y lo hace a partir de la nueva era de la industria de la automoción electrificada para con la que ha preparado su paulatino desembarco a partir de un sobrio y elegante GT y un todocamino de corte coupé, el primero, un coche híbrido y el segundo, eléctrico.

Sea como fuere, el Polestar 1 se caracteríza por ser la alternativa sueca a coches alemanes de altas prestaciones como son BMW M4 o el Audi RS5 coupé por eso, además de mostrarse como soberbios automóviles para largo recorrido, su naturaleza les ha concebido para ser disfrutados en circuito en uno de populares días de tandas o track days. Y si rodar en circuito cerrado se trata, el de referencia es el situado en Nuremberg.

El trazado alemán es escogido por marcas y aficionados para poner y ponerse a prueba, tanto máquinas como humanos, entre carrera y carrera siempre y cuando se trata de la temporada de apertura de la pista del Circuito de Nürburgring.

Habíamos visto las buenas actitudes del Polestar 1 en un tramo cerrado como es el de la subida a los terrenos del duque de Richmond durante la celebración anual, salvo la cancelada de este 2020 por la crisis generada por el nuevo coronavirus, del Festival of Speed de Goodwood, pero no habíamos visto a este vehículo ni en el Infierno Verde ni tampoco conducido a manos de un piloto ajeno a la marca que lo produce.

En este caso se ha puesto al volante de una unidad del Polestar 1 el popular Misha Charoudin quien, a través de su canal de vídeos de Youtube ha publicado la grabación de su experiencia a bordo del deportivo híbrido en el mítico entorno alemán.

Y es que este tanque, el Polestar 1, obviamente, fija su peso en nada más y nada menos que 2,2 toneladas pero, ese lastre junto, con un equipo motriz que eroga en total hasta casi 610 CV y un total de unos portentosos 1.000 Nm de par motor, le permiten desplazarse por los más de 20 km de pista con un aplomo fascinante a velocidades de vértigo en un devenir de curvas y rectas que son consumidas de manera sobresaliente como así quedó registrado en el vídeo que mostramos a continuación.

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