Al volante del MINI Cooper SE: más de 200 km de diversión sin gastar gasolina

Antonio Roncero    @roncero_antonio    5 marzo 2020     6 min.
Al volante del MINI Cooper SE: más de 200 km de diversión sin gastar gasolina

Nos ponemos al volante del primer MINI eléctrico, el Cooper SE, que es tan divertido como la versión de gasolina y no cuesta mucho más.

El mejor rival del MINI Cooper SE, el primer MINI eléctrico, no puede ser otro que el MINI Cooper S, con el motor de gasolina de 192 CV con cambio automático, por aquello de igualar lo más posible.

Pues bien, tras conducir el nuevo MINI Cooper SE en una breve toma de contacto en Madrid, te vamos a dar 5 claves por las que deberías ir pensando en eléctrico si el MINI está en tu punto de mira. Y más concretamente en el MINI Cooper SE si lo que buscas es un coche eléctrico que se salga de lo “corriente”.

1.- Tan MINI como siempre

Lo primero es que por el hecho de ser eléctrico, no renuncias en el nuevo MINI Cooper SE a las sensaciones que transmiten los MINI de gasolina. Al conducirlo da la impresión de acelerar incluso más que el Cooper S, aunque según las cifras oficiales se quede unas décimas por detrás. De hecho, para alcanzar los 100 km/h con el Cooper SE necesitas apenas 7,3 segundos, mientras que la versión de gasolina lo hace en 6,7 segundos. Eso sí, la velocidad está limitada a 150 km/h. No me digas que no tienes suficiente…

Mini Cooper Se 8

Pero en todo lo que no sea aceleración pura y dura, cuando tienes que pisar a fondo el pedal derecho sin recurrir al cambio de marchas y desde cualquier velocidad, la respuesta del MINI eléctrico es… electrizante. Una maravilla, por cómo empuja, por la suavidad, por la ausencia de ruido… Algo que nos sigue sorprendiendo todavía cada vez que probamos un coche eléctrico. Y más si es de cierta potencia, como este MINI, que rinde 184 CV.

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Claro que no es solo motor. El MINI Cooper SE acompaña con una puesta a punto del chasis que convierte a este MINI en un prodigio de agilidad. Por lo rápida y directa que es la dirección, y por lo bien que funcionan las suspensiones, firmes, pero sin ser incómodas.

La versión eléctrica pesa casi 150 kg más, y tiene una altura libre al suelo algo mayor por la forma del alojamiento de la batería en el piso. Pero como el centro de gravedad baja precisamente por cómo va colocada la batería, el MINI Cooper SE no pierde ni un ápice de ese comportamiento deportivo y “juguetón”.

2.- Autonomía: 235 km pueden ser suficientes

Quizás en otro coche más grande que pueda hacer la función de único vehículo para todo uso, 235 km de autonomía podrían parecer pocos. Pero piénsalo bien. El MINI normalmente es un segundo coche, o un coche para uso principalmente urbano. Y en estos casos, los 235 km de autonomía que anuncia te darán para no tener que enchufarlo más de un par de veces por semana.

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La batería tiene 32,6 kWh de capacidad, y puede cargarse en un enchufe doméstico, aunque lo ideal es montar el Wallbox opcional. Con este último, recargando a 11 kW de potencia, llevas la batería al 80% de su capacidad en alrededor de 2 horas y media. También admite carga rápida hasta 50 kW.

La autonomía real difiere mucho del modo en el que conduzcas. Por lo poco que pudimos comprobar, a falta de una prueba más a fondo, no será difícil alcanzar esos 235 km “oficiales” WLTP a poco que circules por la ciudad y periferia, aprovechando las ventajas del modo “Green”. Y en casos de apuro puedes tirar del “Green+”, que otorga unos kilómetros adicionales sacrificando prestaciones y funciones de confort como la climatización.

Mini Cooper Se 10

Existe un botón en la consola central para pasar del modo de máxima recuperación de energía al levantar el pie del acelerador a uno menos intenso. En el modo de mayor recuperación, cuando le coges el tacto al pedal es posible conducir utilizando sólo el acelerador en la mayoría de los casos, sin tener que frenar para perder velocidad. Cómodo… y eficiente.

Eso sí, en modo Sport y con curvas por delante, difícil será pasar de los 200 km. La merma en autonomía cuando se conduce de forma deportiva es algo común a cualquier coche eléctrico, no solo cosa de este MINI.

3.- No sacrificas espacio ni capacidad de maletero

Aquí no hay excusas para no decidirte por la versión eléctrica. La batería tiene forma de T y se integra en el piso aprovechando la zona del túnel central, por lo que la habitabilidad del MINI eléctrico es la misma que la de las versiones con motor de gasolina.

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Y lo mismo sucede con la capacidad de maletero. Sigue siendo pequeña, pero es la misma que en el resto de los MINI. Tampoco puedes pedirle más a un coche de este tamaño.

4.- Bajo coste por kilómetro y etiqueta CERO

Estas son dos de las principales ventajas de este coche, que para muchos pueden ser tan importantes o más que la de la experiencia de conducción eléctrica, que ya te digo que al final engancha.

En el día a día, con el MINI Cooper SE estarás en torno a los 8 l/100 km de media en consumo, lo que supone alrededor de 11 euros por cada 100 km. Con la versión eléctrica estarás fácilmente en la mitad.

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Y si este argumento no es lo suficientemente potente, sobre todo en un coche que no está destinado por lo general a hacer muchos kilómetros al año, el de contar con la etiqueta CERO resulta definitivo. Ten en cuenta todas las ventajas que aporta: utilización del BUS-VAO, aparcamiento gratuito en zona regulada… Tal y como se están poniendo las cosas, sólo el hecho de saber que puedes acceder a la ciudad ya es una ventaja más que suficiente.

5.- Precio: no es tan caro

Y llegamos al asunto monetario. Si la comparación la hacemos con el Cooper S de gasolina automático, equivalente en “sensaciones”, el eléctrico apenas cuesta unos 2.000 euros más. No me parece una diferencia desorbitada.

Mini Cooper Se 19

En cuanto a la comparación con otros coches eléctricos urbanos, los hay más baratos, como el Opel Corsa-e o el Peugeot e-208, que también anuncian una autonomía superior. Pero juegan en otra liga tanto en prestaciones como en exclusividad.

El principal rival del MINI Cooper SE sería el nuevo Honda e, disponible desde 34.800 euros en la variante con 136 CV, y desde 37.800 con 154 CV, en ambos casos con 200 km de autonomía. El MINI Cooper SE parte desde 33.950 euros para la versión de acceso a la gama, que ya incluye un equipamiento muy razonable.

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Sin duda, como ya anticipamos en su día, el duelo entre el Honda e y el MINI Cooper SE va a dar mucho que hablar en la ciudad. Y nosotros esperamos poder compararlos muy pronto.

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